Si señor. ¡¡Y bien grandes!!. ¡¡Y preciosas!!. Sí, aunque suene raro, estamos encantadas de que nos hayan dado calabazas. Y es que era el elemento decorativo que necesitábamos para nuestro escaparate. Es lo que tiene vivir en una ciudad pequeña. Con campo alrededor. Con unas huertas que enamoran y con unos hortelanos que disfrutan de su trabajo. Amén de cultivar todo tipo de hortalizas y verduras, que hacen que en esta zona seamos unos privilegiados a la hora del yantar, nuestro amigo Juan (a quien damos las gracias por su amabilidad) ha cultivado unas calabazas dignas del Guinnes. Calabazas que una vez que las acercamos hasta la tienda (aquí las gracias se las damos a Ricardo) y las dejamos bien limpias, lucen en nuestro escaparate aportando una luz y llenando un espacio que a nadie ha dejado indiferente. Hasta aquí nos desplazamos a por ellas. Y cuando las vimos, no sabíamos por cual decidirnos. Creo que acertamos.
La verdad que nos gusta el toque de luz que han aportado al escaparate.
Crema de calabaza, cabello de ángel. Ummm. Apetitoso. Como estos modelos que lucen nuestras estupendas.
Los bolsos claros de Liebeskind Berlín (200 €) y el chaquetón de Qubha (260 €)
Zapatos de Strena (168 €) y cartera con strass de Tosca Blu (81€)
Vestido gris de Nuov Borgo (246 €) y bailarina de Bisue (76 €) vestido con paillets de Nuovo Borgo (242€), chaqueton de Custo Barcelona (238 €), zapatos con stras de Strena (158 €)
Como puf no tienen desperdicio
Esa pelona de Custo.......Genial
A mi me recuerda a un cuento. A ver....tengo los zapatos y una cartera divina. Quizás, si toco las calabazas con una varita se conviertan en una carroza y nos lleven a todas al baile. ¡¡Uy!! Creo que no voy a escribir más post de noche. Aunque soñar es gratis, no?
![]() | ||
Os dais cuenta, no? Yo he hablado de carrozas, no de furgonetas. Lo dicho, no más post nocturnos.
Pero es que........Tengo todos los elementos y no puedo resistirme. ¡¡Vuelvo a soñar!!
Chaqueta de Custo Barcelona (208 €), acordonado de ante de Lilimill (84 €)
Y la madrastra del cuento no me oirá llegar. Me quitaré (procuraré no perder uno) los zapatitos de tacón y me pondré estos acordonados planitos. Con ellos volaré y podré llegar antes de que den las doce y se rompa el hechizo.
Y hasta aquí el post de hoy. Espero que os haya gustado o por lo menos entretenido. Y así, cuando rememore los post que he ido subiendo a este blog, me encantaría no tener que decir.....Y nos dieron calabazas.